Salmos 18:1-14 Nueva Versión Internacional (NVI)

1. ¡Cuánto te amo, Señor, fuerza mía!

2. El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador;es mi Dios, el peñasco en que me refugio.Es mi escudo, el poder que me salva,¡mi más alto escondite!

3. Invoco al Señor, que es digno de alabanza,y quedo a salvo de mis enemigos.

4. Los lazos de la muerte me envolvieron;los torrentes destructores me abrumaron.

5. Me enredaron los lazos del sepulcro,y me encontré ante las trampas de la muerte.

6. En mi angustia invoqué al Señor;clamé a mi Dios,y él me escuchó desde su templo;¡mi clamor llegó a sus oídos!

7. La tierra tembló, se estremeció;se sacudieron los cimientos de los montes;¡retemblaron a causa de su enojo!

8. Por la nariz echaba humo,por la boca, fuego consumidor;¡lanzaba carbones encendidos!

9. Rasgando el cielo, descendió,pisando sobre oscuros nubarrones.

10. Montando sobre un querubín, surcó los cielosy se remontó sobre las alas del viento.

11. Hizo de las tinieblas su escondite,de los oscuros y cargados nubarronesun pabellón que lo rodeaba.

12. De su radiante presencia brotaron nubes,granizos y carbones encendidos.

13. En el cielo, entre granizos y carbones encendidos,se oyó el trueno del Señor,resonó la voz del Altísimo.

14. Lanzó sus flechas, sus grandes centellas;dispersó a mis enemigos y los puso en fuga.

Salmos 18