39. —Resulta que ustedes los fariseos —les dijo el Señor—, limpian el vaso y el plato por fuera, pero por dentro están ustedes llenos de codicia y de maldad.
40. ¡Necios! ¿Acaso el que hizo lo de afuera no hizo también lo de adentro?
41. Den más bien a los pobres de lo que está dentro, y así todo quedará limpio para ustedes.
42. »¡Ay de ustedes, fariseos!, que dan la décima parte de la menta, de la ruda y de toda clase de legumbres, pero descuidan la justicia y el amor de Dios. Debían haber practicado esto, sin dejar de hacer aquello.