32. Cuando oyeron de la resurrección, unos se burlaron; pero otros le dijeron:—Queremos que usted nos hable en otra ocasión sobre este tema.
33. En ese momento Pablo salió de la reunión.
34. Algunas personas se unieron a Pablo y creyeron. Entre ellos estaba Dionisio, miembro del Areópago, también una mujer llamada Dámaris, y otros más.