Génesis 42:25-34 Nueva Versión Internacional (NVI)

25. José dio también la orden de que llenaran de alimentos sus costales, que repusieran en cada una de sus bolsas el dinero que habían pagado, y que les dieran provisiones para el viaje. Y así se hizo.

26. Entonces ellos cargaron el alimento sobre sus asnos y emprendieron el viaje de vuelta.

27. Cuando llegaron al lugar donde acamparían esa noche, uno de ellos abrió su bolsa para darle de comer a su asno, ¡y allí en la abertura descubrió su dinero!

28. Entonces les dijo a sus hermanos:—¡Me devolvieron el dinero! Miren, ¡aquí está, en mi bolsa!Los otros se asustaron mucho, y temblando se decían unos a otros:—¿Qué es lo que Dios nos ha hecho?

29. Al llegar a Canaán, donde estaba su padre Jacob, le contaron todo lo que les había sucedido:

30. —El hombre que gobierna aquel país nos trató con rudeza, a tal grado que nos acusó de ser espías.

31. Nosotros le dijimos: “Somos gente honrada. No somos espías.”

32. Además, le dijimos: “Somos doce hermanos, hijos de un mismo padre. Uno ya no vive, y el menor se ha quedado con nuestro padre en Canaán.”

33. »Entonces el hombre que gobierna aquel país nos dijo: “Con esto voy a comprobar si en verdad son gente honrada. Dejen aquí conmigo a uno de sus hermanos, y vayan a llevar alimento para calmar el hambre de sus familias.

34. Pero a la vuelta tráiganme a su hermano menor. Así comprobaré que no son espías, y que en verdad son gente honrada. Luego les entregaré de vuelta a su hermano, y podrán moverse con libertad por el país.”

Génesis 42