1 Timoteo 2:7-11 Nueva Versión Internacional (NVI)

7. y para proclamarlo me nombró heraldo y apóstol. Digo la verdad y no miento: Dios me hizo maestro de los gentiles para enseñarles la verdadera fe.

8. Quiero, pues, que en todas partes los hombres levanten las manos al cielo con pureza de corazón, sin enojos ni contiendas.

9. En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas ni vestidos costosos.

10. Que se adornen más bien con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan servir a Dios.

11. La mujer debe aprender con serenidad, con toda sumisión.

1 Timoteo 2