24. Había porteros en los cuatro puntos cardinales.
25. Cada siete días, sus parientes que vivían en las aldeas se turnaban para ayudarlos.
26. Los cuatro porteros principales estaban en servicio permanente. Eran levitas y custodiaban las salas y los tesoros del templo de Dios.
27. Durante la noche montaban guardia alrededor del templo, y en la mañana abrían sus puertas.