1 Crónicas 23:13-30 Nueva Versión Internacional (NVI)

13. Los hijos de Amirán fueron Aarón y Moisés. Aarón y sus descendientes fueron los escogidos para presentar las ofrendas santas, quemar el incienso, servir al Señor y pronunciar la bendición en su nombre.

14. A Moisés, hombre de Dios, y a sus hijos se les incluyó en la tribu de Leví.

15. Los hijos de Moisés fueron Guersón y Eliezer.

16. Sebuel fue el primero de los descendientes de Guersón.

17. Eliezer no tuvo sino un solo hijo, que fue Rejabías, pero éste sí tuvo muchos hijos.

18. El primer hijo de Izar fue Selomit.

19. El primer hijo de Hebrón fue Jerías; el segundo, Amarías; el tercero, Jahaziel, y el cuarto, Jecamán.

20. El primer hijo de Uziel fue Micaías, y el segundo, Isías.

21. Los hijos de Merari fueron Majlí y Musí.Los hijos de Majlí fueron Eleazar y Quis.

22. Eleazar murió sin tener hijos: solamente tuvo hijas. Éstas se casaron con sus primos, los hijos de Quis.

23. Musí tuvo tres hijos: Majlí, Edar y Jeremot.

24. Éstos fueron los descendientes de Leví por sus familias patriarcales. El censo los registró por nombre como jefes de sus familias patriarcales. Éstos prestaban servicio en el templo del Señor, y eran mayores de veinte años.

25. David dijo: «Desde que el Señor, Dios de Israel, estableció a su pueblo y estableció su residencia para siempre en Jerusalén,

26. los levitas ya no tienen que cargar el santuario ni los utensilios que se usan en el culto.»

27. De acuerdo con las últimas disposiciones de David, fueron censados los levitas mayores de veinte años,

28. y su función consistía en ayudar a los descendientes de Aarón en el servicio del templo del Señor. Eran los responsables de los atrios, de los cuartos y de la purificación de todas las cosas santas; en fin, de todo lo relacionado con el servicio del templo de Dios.

29. También estaban encargados del pan de la Presencia, de la harina para las ofrendas de cereales, de las hojuelas sin levadura, de las ofrendas fritas en sartén o cocidas, y de todas las medidas de capacidad y de longitud.

30. Cada mañana y cada tarde debían estar presentes para agradecer y alabar al Señor.

1 Crónicas 23