28. Entonces Pedro lo llamó:—Señor, si realmente eres tú, ordéname que vaya hacia ti caminando sobre el agua.
29. —Sí, ven —dijo Jesús.Entonces Pedro se bajó por el costado de la barca y caminó sobre el agua hacia Jesús,
30. pero cuando vio el fuerte viento y las olas, se aterrorizó y comenzó a hundirse.—¡Sálvame, Señor! —gritó.
31. De inmediato, Jesús extendió la mano y lo agarró. —Tienes tan poca fe —le dijo Jesús—. ¿Por qué dudaste de mí?