13. El puerco montés la devora, Y de ella se alimenta todo lo que se mueve en el campo.
14. Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora, Te rogamos; Mira y ve desde el cielo, y cuida esta vid,
15. La cepa que Tu diestra ha plantado Y el hijo que para Ti has fortalecido.
16. Está quemada con fuego, y cortada; Ante el reproche de Tu rostro perecen.