1. ¡Cuán bienaventurado es aquél cuya transgresión es perdonada, Cuyo pecado es cubierto!
2. ¡Cuán bienaventurado es el hombre a quien el Señor no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño!
3. Mientras callé mi pecado , mi cuerpo se consumió Con mi gemir durante todo el día.