Mateo 13:3-23 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

3. Y les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: "El sembrador salió a sembrar;

4. y al sembrar, parte de la semilla cayó junto al camino, y vinieron las aves y se la comieron.

5. Otra parte cayó en pedregales donde no tenía mucha tierra; y enseguida brotó porque no tenía profundidad de tierra;

6. pero cuando salió el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.

7. Otra parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron y la ahogaron.

8. Y otra parte cayó en tierra buena y dio fruto, algunas semillas a ciento por uno, otras a sesenta y otras a treinta.

9. El que tiene oídos, que oiga."

10. Y acercándose los discípulos, dijeron a Jesús: "¿Por qué les hablas en parábolas?"

11. Jesús les respondió: "Porque a ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos, pero a ellos no se les ha concedido.

12. Porque a cualquiera que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia; pero a cualquiera que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.

13. Por eso les hablo en parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden.

14. Y en ellos se cumple la profecía de Isaías que dice: 'Al oir, ustedes oiran, pero no entenderan; Y viendo veran, pero no percibiran;

15. Porque el corazon de este pueblo se ha vuelto insensible, Y con dificultad oyen con sus oidos; Y han cerrado sus ojos; De otro modo, verian con los ojos, Oirian con los oidos, Y entenderian con el corazon, Y se convertirian, Y yo los sanaria.'

16. Pero dichosos los ojos de ustedes, porque ven, y sus oídos, porque oyen.

17. Porque en verdad les digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que ustedes ven, y no lo vieron; y oír lo que ustedes oyen, y no lo oyeron.

18. "Ustedes, pues, escuchen la parábola del sembrador.

19. A todo el que oye la palabra del reino y no la entiende, el maligno viene y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es aquél en quien se sembró la semilla junto al camino.

20. Y aquél en quien se sembró la semilla en pedregales, éste es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo;

21. pero no tiene raíz profunda en sí mismo, sino que sólo es temporal, y cuando por causa de la palabra viene la aflicción o la persecución, enseguida se aparta de ella.

22. Y aquél en quien se sembró la semilla entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero las preocupaciones del mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se queda sin fruto.

23. Pero aquél en quien se sembró la semilla en tierra buena, éste es el que oye la palabra y la entiende; éste sí da fruto y produce, uno a ciento, otro a sesenta y otro a treinta por uno."

Mateo 13