20. Aod vino a él cuando estaba sentado solo en su sala de verano. Y Aod dijo: "Tengo un mensaje de Dios para usted." Y él se levantó de su silla.
21. Aod alargó la mano izquierda, tomó la espada de su muslo derecho, y se la hundió en el vientre.
22. Y la empuñadura entró también tras la hoja, y la gordura se cerró sobre la hoja, pues no sacó la espada de su vientre. Y se le salieron los excrementos.
23. Entonces salió Aod al corredor, cerró tras sí las puertas de la sala de la terraza y les pasó el cerrojo.
24. Después que él salió, vinieron los siervos y vieron que las puertas de la sala de la terraza tenían el cerrojo pasado, y dijeron: "Sin duda que el rey está haciendo su necesidad en la sala de verano."