Job 9:24-35 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

24. La tierra es entregada en manos de los impíos; El cubre el rostro de sus jueces; Si no es El, ¿entonces quién será?

25. Mis días son más ligeros que un corredor; Huyen, no ven el bien;

26. Se deslizan como barcos de juncos, Como águila que se arroja sobre su presa.

27. Aunque yo diga: 'Olvidaré mi queja, Cambiaré mi triste semblante y me alegraré,'

28. Temeroso estoy de todos mis dolores, Sé que Tú no me absolverás.

29. Si soy impío, ¿Para qué, pues, esforzarme en vano?

30. Si me lavara con nieve Y limpiara mis manos con lejía,

31. Aun así me hundirías en la fosa, Y mis propios vestidos me aborrecerían.

32. Porque El no es hombre como yo, para que Le responda, Para que juntos vengamos a juicio.

33. No hay árbitro entre nosotros, Que ponga su mano sobre ambos.

34. Que El quite de mí Su vara, Y no me espante Su terror.

35. Entonces yo hablaré y no Le temeré; Porque en mi opinión yo no soy así.

Job 9