18. ¿De qué sirve el ídolo que su artífice ha esculpido, O la imagen fundida, maestra de mentiras, Para que su hacedor confíe en su obra Cuando hace ídolos mudos?
19. ¡Ay del que dice al madero: 'Despierta,' O a la piedra muda: 'Levántate!' ¿Será esto tu maestro? Mira que está cubierto de oro y plata, Y no hay aliento alguno en su interior.
20. Pero el Señor está en Su santo templo: Calle delante de El toda la tierra."