Génesis 28:11-22 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

11. Llegó a cierto lugar y pasó la noche allí, porque el sol se había puesto; tomó una de las piedras del lugar, la puso de cabecera y se acostó en aquel lugar.

12. Tuvo un sueño, y vio que había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo. Por ella los ángeles de Dios subían y bajaban.

13. El Señor estaba de pie junto a él, y dijo: "Yo soy el Señor, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac. La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.

14. También tu descendencia será como el polvo de la tierra. Te extenderás hacia el occidente y hacia el oriente, hacia el norte y hacia el sur; y en ti y en tu simiente serán bendecidas todas las familias de la tierra.

15. Ahora bien, Yo estoy contigo. Te guardaré por dondequiera que vayas y te haré volver a esta tierra. No te dejaré hasta que haya hecho lo que te he prometido."

16. Despertó Jacob de su sueño y dijo: "Ciertamente el Señor está en este lugar y yo no lo sabía."

17. Y tuvo miedo y añadió: "¡Cuán imponente es este lugar! Esto no es más que la casa de Dios, y ésta es la puerta del cielo."

18. Jacob se levantó muy de mañana, y tomó la piedra que había puesto de cabecera, la erigió por señal y derramó aceite por encima.

19. A aquel lugar le puso el nombre de Betel (Casa de Dios), aunque anteriormente el nombre de la ciudad había sido Luz.

20. Entonces Jacob hizo un voto, diciendo: "Si Dios está conmigo y me guarda en este camino en que voy, y me da alimento para comer y ropa para vestir,

21. y vuelvo sano y salvo (en paz) a casa de mi padre, entonces el Señor será mi Dios.

22. Y esta piedra que he puesto por señal será casa de Dios; y de todo lo que me des, te daré el diezmo."

Génesis 28