Deuteronomio 8:5-10 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

5. Por tanto, debes comprender en tu corazón que el Señor tu Dios te estaba disciplinando, así como un hombre disciplina a su hijo.

6. Guardarás, pues, los mandamientos del Señor tu Dios, para andar en Sus caminos y para temerlo (reverenciarlo).

7. Porque el Señor tu Dios te trae a una tierra buena, a una tierra de corrientes de aguas, de fuentes y manantiales que fluyen por valles y colinas;

8. una tierra de trigo y cebada, de viñas, higueras y granados; una tierra de aceite de oliva y miel;

9. una tierra donde comerás el pan sin escasez, donde nada te faltará; una tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes puedes sacar cobre.

10. Cuando hayas comido y te hayas saciado, bendecirás al Señor tu Dios por la buena tierra que El te ha dado.

Deuteronomio 8