24. Así que el Señor nos mandó que observáramos todos estos estatutos, y que temiéramos siempre al Señor nuestro Dios para nuestro bien y para preservarnos la vida, como hasta hoy.
25. Y habrá justicia para nosotros si cuidamos de observar todos estos mandamientos delante del Señor nuestro Dios, tal como El nos ha mandado.