5. (como cuando un hombre va al bosque con su amigo para cortar leña, y su mano blande el hacha para cortar el árbol, y el hierro salta del mango y golpea a su amigo, y éste muere), él puede huir a una de estas ciudades y vivir.
6. No sea que el vengador de la sangre en el furor de su ira persiga al que lo mató, y lo alcance porque el camino es largo, y le quite la vida aunque él no merecía la muerte, porque no lo había odiado anteriormente.
7. Por tanto, te ordeno: 'Reservarás para ti tres ciudades.'
8. Si el Señor tu Dios ensancha tu territorio, como ha jurado a tus padres, y te da toda la tierra que ha prometido dar a tus padres
9. (si guardas cuidadosamente todos estos mandamientos que te mando hoy, de amar al Señor tu Dios y de andar siempre en Sus caminos), entonces te añadirás tres ciudades más, además de estas tres.