Romanos 6:8-17 Nueva Biblia al Día (NBD)

8. Y por cuanto nuestra naturaleza pecadora murió con Cristo, creemos que también compartiremos su nueva vida.

9. Sabemos que Cristo resucitó y jamás volverá a morir. La muerte no ejercerá sobre él poder alguno.

10. Cuando Cristo murió, murió de una vez por todas al poder del pecado; pero ahora vive para Dios.

11. Así también ustedes, considérense muertos a la vieja naturaleza pecadora, y vivan para Dios unidos a Cristo Jesús nuestro Señor.

12. No dejen que el pecado domine su cuerpo mortal; no lo obedezcan siguiendo sus malos deseos.

13. No entreguen ninguna parte de su cuerpo al pecado para que se convierta en instrumento del mal. Más bien, entréguense por completo a Dios, como quienes ya han muerto y han vuelto a vivir. Y preséntenle sus miembros como instrumentos para la justicia.

14. ¡Que el pecado no vuelva a dominarlos! Ya no estamos atados a la ley; ahora vivimos bajo la gracia de Dios.

15. Entonces, como ya no vivimos bajo la ley sino bajo la gracia de Dios, ¿podemos pecar?¡Claro que no!

16. ¿No comprenden que si ustedes se entregan a alguien como esclavos, los esclavizará para que le sirvan? Pueden escoger hacer: el pecado y morir, u obedecer y ser justos.

17. Pero gracias a Dios que, si bien antes eran esclavos del pecado, ya están obedeciendo de todo corazón las enseñanzas que Dios les ha dado.

Romanos 6