6. Y si es por ese amor gratuito de Dios, entonces ya no depende de lo que ellos hagan. Si así no fuera, la salvación dejaría de ser gratuita.
7. El caso, pues, es el siguiente: la mayoría de los israelitas no han alcanzado lo que andaban buscando. Pero algunos lo han alcanzado porque Dios los ha escogido. Los demás fueron endurecidos.
8. A esto se refieren las Escrituras cuando dicen:“Dios los ha adormecido, les ha cerrado los ojos y oídos para que no entiendan.”
9. Y David, también exclamó:“¡Que sus fiestas se conviertan en trampas y redes, que sean ocasión de tropiezo y de castigo!
10. ¡Que se les oscurezca la vista y no puedan ver!¡Que anden para siempre con la espalda agobiada bajo un gran peso!"
11. Hago ahora esta pregunta: ¿Tropezaron los israelitas para no volver a levantarse? ¡Por supuesto que no! Gracias a su desobediencia, la salvación vino a los gentiles, para que los israelitas sientan celos.
12. Ahora bien, si el mundo entero se ha enriquecido gracias a la desobediencia de ellos, ¿cuánto más valiosa no será su plena restauración?
13. Como ustedes saben, Dios me envió a ustedes los gentiles y yo honro este servicio. Por ello les predico a ustedes, gentiles,
14. para ver si así pongo celosos a algunos de mi propio pueblo y logro que algunos de ellos se salven.
15. El que Dios diera la espalda a los israelitas significó la reconciliación entre Dios y el mundo. Por eso, su restauración será como si un muerto volviera a la vida.