Números 16:21-37 Nueva Biblia al Día (NBD)

21. —Apártense de este pueblo, que voy a destruirlo inmediatamente.

22. Pero Moisés y Aarón se postraron en tierra, delante del SEÑOR:—Oh Dios, Dios de toda la humanidad, ¿has de enojarte con toda el pueblo cuando es un solo hombre el que ha pecado?

23. Y el SEÑOR le dijo a Moisés:

24. —Entonces dile al pueblo que se aparte de las tiendas de Coré, Datán y Abirán.

25. Moisés corrió a las tiendas de Datán y Abirán seguido muy de cerca por los doscientos cincuenta jefes israelitas.

26. —Vamos, rápido —le dijo al pueblo—, apártense de las tiendas de estos hombres inicuos, y no toquen nada que pertenezca a ellos, o serán ustedes incluidos en su pecado y serán destruidos con ellos.

27. Entonces todo el pueblo se apartó de las tiendas de Coré, Datán y Abirán. Datán y Abirán salieron y se pusieron a la puerta de sus tiendas con sus esposas, hijos e hijas.

28. Y Moisés dijo:—Ahora se sabrá si el SEÑOR me ha enviado o no a hacer todas las cosas que he hecho, o si he actuado por mi iniciativa.

29. Si estos hombres mueren en forma natural; de algún accidente o enfermedad común, el SEÑOR no me ha enviado.

30. Pero si el SEÑOR hace un milagro y la tierra se abre y se los traga juntamente con todo lo que les pertenece, y entran vivos en el Seol entonces se sabrá que estos hombres han despreciado al SEÑOR.

31. Apenas había acabado de decir estas palabras; cuando la tierra se abrió debajo de los rebeldes,

32. y una gran grieta se los tragó junto con sus tiendas; familias y amigos que estaban con ellos y con todo lo que poseían.

33. De esta manera entraron vivos en el Seol y la tierra se cerró sobre ellas y perecieron.

34. Todo el pueblo de Israel huyó gimiendo, temeroso de que la tierra también se los tragara a ellos.

35. Enseguida descendió fuego del SEÑOR y quemó a los doscientos cincuenta hombres que estaban ofreciéndole incienso.

36. Y el SEÑOR le dijo a Moisés:

37. —Dile a Eleazar el hijo de Aarón el sacerdote que retire del fuego los incensarios porque son sagrados, dedicados al SEÑOR. Además debes apagar el fuego

Números 16