1. ¡Qué pesar por Nínive, esa ciudad sanguinaria, llena de mentiras y de robos, que como fiera salvaje siempre andaba tras sus presas!
2. ¡Oigan el chasquido de los látigos y el ruido de los carros de guerra de los enemigos que se lanzan contra ella!
3. ¡La caballería ataca con violencia! ¡Miren cómo brillan las espadas y lanzas del ejército enemigo! ¡Son muchos los muertos! ¡Los cadáveres están por montones! ¡La gente se tropieza con ellos!
4. Todo esto es debido a tus engaños porque, como una prostituta, seducías a las naciones. Eras muy hábil para atrapar a los pueblos valiéndote de tus encantos y de tus hechizos.