9. Gente, ¿qué están pensando, que se atreven a desafiar al SEÑOR? ¡Él los destruirá de un solo golpe! ¡Ustedes no tendrán una segunda oportunidad!
10. El SEÑOR arroja a sus enemigos en el fuego como si fueran espinos; entonces ellos arden como si fueran paja.
11. Nínive, de ti ha salido el malvado consejero que se atreve a imaginar que puede hacerle daño al SEÑOR.
12. Así ha dicho el SEÑOR: «¡Aunque los asirios sean muy fuertes y numerosos, los voy a destruir por completo! Y a ti, Judá, pueblo mío, que te he castigado mucho, ya no te castigaré más.
13. Ahora romperé tus cadenas y te libraré de la esclavitud de este rey asirio».
14. Pero acerca de ti, Nínive, el SEÑOR ha dicho: «He decidido el fin de tu dinastía real; los descendientes de tus reyes no se sentarán jamás sobre tu trono. Y yo destruiré tus dioses y tus templos, y te sepultaré, porque te has aferrado a la maldad».
15. ¡Miren! Mensajeros descienden de las montañas trayendo buenas noticias: «Los invasores han sido derrotados y hemos sido salvados». ¡Judá, celebra un día de acción de gracias y ríndele un homenaje al SEÑOR como prometiste, porque nunca más volverás a ser atacada por Nínive! ¡Ha sido destruida para siempre! ¡Jamás la volveremos a ver!