Mateo 27:53-61 Nueva Biblia al Día (NBD)

53. Después de la resurrección de Jesús, esas personas salieron del cementerio y fueron a Jerusalén, donde se aparecieron a muchos.

54. El centurión y los soldados que vigilaban a Jesús, horrorizados por el terremoto y los demás acontecimientos, exclamaron:—¡Verdaderamente éste era el Hijo de Dios!

55. Varias de las mujeres que habían seguido a Jesús desde Galilea y le servían estaban no muy lejos de la cruz.

56. Entre ellas estaban María Magdalena, María la madre de Jacobo y de José, y la madre de los hijos de Zebedeo.

57. Al llegar la noche, un hombre rico de Arimatea llamado José, discípulo de Jesús,

58. fue a Pilato y le reclamó el cuerpo de Jesús. Pilato se lo concedió.

59. José tomó el cuerpo, lo envolvió en una sábana limpia

60. y lo colocó en un sepulcro nuevo labrado en la peña. Hacía poco que había hecho ese sepulcro y ordenó que rodaran una piedra grande para cerrar la entrada. José se alejó,

61. pero María Magdalena y la otra María se quedaron sentadas delante del sepulcro.

Mateo 27