Mateo 12:22-36 Nueva Biblia al Día (NBD)

22. Entonces le presentaron a un endemoniado, ciego y mudo. Jesús lo sanó y el hombre pudo ver y hablar.

23. La gente estaba maravillada.«¡Quizás Jesús es el Hijo de David!» —exclamaban.

24. Al oír tales exclamaciones, los fariseos dijeron: «Al contrario, este hombre expulsa demonios en el nombre de Beelzebú, príncipe de los demonios».

25. Jesús, que sabía lo que estaban pensando, les dijo: «Un reino dividido acaba por destruirse. Una ciudad o una familia divididas no pueden durar.

26. Si Satanás echa fuera a Satanás, pelea consigo mismo y acabará destruyendo su propio reino.

27. Y si, como dicen, yo echo fuera demonios invocando el poder de Beelzebú, ¿invocando qué poder los echan fuera los seguidores de ustedes? Por tanto, ellos serán quienes los juzguen a ustedes.

28. Ahora bien, si yo echo fuera los demonios por el poder del Espíritu de Dios, el reino de Dios ha llegado a ustedes.

29. »¿Cómo podrá alguien entrar en la casa de un hombre fuerte y robarle sus bienes, si primero no lo ata? Sólo así podrá robarle.

30. »El que no está a mi favor, está en contra de mí. Y el que no recoge conmigo, desparrama.

31. Cualquier blasfemia o cualquier otro pecado le será perdonado a la gente; pero el que ofenda al Espíritu Santo no tendrá perdón.

32. Cualquiera que hable mal del Hijo del hombre, será perdonado; pero el que hable mal contra el Espíritu Santo no será perdonado ni en este mundo ni en el venidero.

33. »Uno conoce un árbol por sus frutos. Cultiven un árbol bueno y su fruto será bueno o cultiven un árbol malo y su fruto será malo.

34. ¡Crías de víboras! ¿Cómo van a hablar de lo bueno si son malos? ¡La boca expresa lo que hay en el corazón!

35. El habla de un hombre bueno revela la bondad de su corazón. El corazón del malo está lleno de maldad, y ésta se refleja en sus palabras.

36. Les aseguro que en el día del juicio van a dar cuenta de las cosas que digan descuidadamente.

Mateo 12