14. La fama de Jesús llegó a oídos del rey Herodes. Este pensó que Jesús era Juan el Bautista que había resucitado con poderes extraor- dinarios.
15. De hecho, algunos pensaban que Jesús era Elías; y otros, que era uno de los profetas.
16. Pero Herodes reiteró: «Él es Juan, a quien yo decapité, que ha vuelto a la vida».
17-18. Herodes había mandado arrestar a Juan porque éste le decía que era ilegal que se casara con Herodías, la esposa de su hermano Felipe.
19. Por eso mismo, Herodías odiaba a Juan y quería que lo mataran, pero no había podido conseguirlo.
20. Y ya que Herodes respetaba a Juan porque lo consideraba un hombre justo y santo, lo había arrestado para ponerlo a salvo. Aunque cada vez que hablaba con Juan salía turbado, le gustaba escucharlo.