9. Jesús le había ordenado a sus discípulos que le tuvieran siempre lista una barca para evitar que el gentío lo oprimiera,
10. pues como había realizado muchas curaciones, todos los enfermos lo rodeaban tratando de tocarlo.
11. Cada vez que los endemoniados lo veían, caían de rodillas ante él gritando:—¡Tú eres el Hijo de Dios!
12. Actuaban así a pesar de que les tenía prohibido revelar quién era.
13. Jesús subió a una montaña y llamó a los que él quiso; y ellos vinieron a él.
14. De entre todos seleccionó a doce para que estuvieran siempre con él y salieran a predicar. A estos los llamó apóstoles,
15. y les dio autoridad para echar fuera demonios.
16. Aquellos doce fueron:Simón (a quien llamó Pedro),
17. Jacobo y Juan (hijos de Zebedeo, a quienes Jesús les puso el apodo de Boanerges, es decir, Hijos del Trueno),
18. Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo (hijo de Alfeo), Tadeo, Simón el zelote
19. y Judas Iscariote (el que lo traicionó).
20. Luego Jesús entró en una casa a la que acudió tanta gente que ni siquiera pudieron comer él y sus discípulos.
21. Los familiares de Jesús, al enterarse de lo que estaba pasando, salieron a buscarlo porque creían que se había vuelto loco.
22. Los maestros de la ley que habían llegado de Jerusalén decían: «Los demonios lo obedecen porque tiene a Beelzebú, el príncipe de los demonios».