37. ¿Cómo, pues, puede ser hijo de David si el propio David lo llama “Señor”?La gente lo escuchaba con agrado.
38. Jesús continuó enseñando y les decía:—Cuídense de los maestros de la ley, pues a ellos les gusta pasearse vestidos con ropas que llaman la atención, para que los saluden en las plazas.
39. También les gusta ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los lugares de honor en los banquetes.
40. Les quitan sus bienes a las viudas y luego ocultan ese hecho con largas oraciones para impresionar a los demás. Ésos recibirán mayor castigo.