2. »Cualquier persona que toque algo que es ritualmente impuro, como el cuerpo muerto de un animal prohibido como alimento, salvaje o doméstico, o el cuerpo de un insecto prohibido, es culpable, aun cuando no se haya dado cuenta de que lo tocó.
3. O si toca una impureza humana, de cualquier tipo, quedará impuro en cuanto se dé cuenta de ello.
4. »Si alguien jura precipitadamente, sea el voto bueno o malo, en cuanto comprenda su error, será culpable.
5. »En cualquiera de estos casos, confesará el pecado cometido
6. y presentará una ofrenda por su culpa: una hembra de ganado menor, oveja o cabra. El sacerdote hará la expiación por esa persona, y ésta quedará perdonada.
7. »Si el culpable es una persona muy pobre, de modo que no tiene forma de ofrecer una oveja, entonces ofrecerá dos tórtolas o dos pichones de paloma: uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto.
8. El sacerdote ofrecerá en primer lugar el sacrificio por el pecado, para lo cual le cortará el cuello al ave, pero sin separarle la cabeza del cuerpo.
9. Enseguida rociará una parte de la sangre sobre el costado del altar y el resto lo derramará al pie del altar; es la ofrenda por el pecado.
17-18. »Cualquiera que desobedezca alguna ley de Dios, aun sin darse cuenta, de todos modos es culpable. Entonces deberá llevar al sacerdote un carnero sin defecto, o su equivalente en dinero. El precio será fijado de la misma manera que se hace con el sacrificio por la culpa. El sacerdote, entonces, presentará el sacrificio a favor del que pecó sin darse cuenta, y éste será perdonado.
19. Se trata de una ofrenda por la culpa, porque ciertamente esa persona es culpable delante del SEÑOR».