1. »Cuando alguna persona quiera presentar una ofrenda de cereales al SEÑOR, deberá llevar harina de la mejor calidad, sobre la cual derramará aceite puro de oliva e incienso.
2. Entonces tomará un puñado, que simbolizará el total de la ofrenda, y lo entregará a uno de los sacerdotes para que queme el puñado de harina. Será una ofrenda quemada de grato olor al SEÑOR.
3. El resto será entregado a Aarón y a sus hijos como alimento; pero la ofrenda entera será considerada como una ofrenda santa, agradable al SEÑOR.