Jueces 16:18-31 Nueva Biblia al Día (NBD)

18. Dalila comprendió que finalmente le había dicho la verdad, por lo que mandó a buscar a los cinco jefes de los filisteos.—Vengan una vez más —dijo ella—, porque esta vez me ha dicho la verdad.Entonces ellos llevaron el dinero que le habían ofrecido.

19. Ella lo hizo dormir con la cabeza sobre sus rodillas, y ellos hicieron entrar a un barbero para que le cortara el cabello. Dalila se dio cuenta de que su fuerza lo había abandonado.

20. Entonces ella gritó:—¡Los filisteos están aquí para capturarte, Sansón!Él despertó y pensó: "Haré como antes: me desharé de ellos". Pero no se había dado cuenta de que Jehová se había apartado de él.

21. Los filisteos lo capturaron, le sacaron los ojos y se lo llevaron a Gaza, donde fue atado con cadenas de bronce y lo ocuparon para mover el molino y moler grano en la prisión. Pero el cabello no tardó en crecerle nuevamente.

23-24. Los jefes de los filisteos hicieron una gran fiesta a fin de celebrar la captura de Sansón. El pueblo hacía sacrificios al dios Dagón y lo alababan con mucho entusiasmo.—Nuestro dios nos ha librado de nuestro enemigo Sansón —gritaban satisfechos al verlo allí atado con cadenas—. El enemigo de nuestra nación, el que destruía nuestros campos, y el que ha matado a tantos de nosotros, ahora está en nuestro poder.

25. El pueblo ya medio embriagado, pidió:—¡Traigan a Sansón para divertirnos a costa suya!Lo llevaron desde la prisión y lo pusieron en medio del templo entre las dos columnas que sostenían el techo.

26. Sansón le dijo al muchacho que lo guiaba de la mano:—Pon una de mis manos en cada columna, para apoyarme en ellas.

27. El templo estaba completamente lleno de gente. Los cinco caudillos filisteos estaban allí también junto con tres mil personas que desde los balcones contemplaban a Sansón y se reían de él.

28. Sansón oró a Jehová y le dijo:—Oh Jehová, acuérdate de mí nuevamente, dame fuerzas sólo una vez más, para vengarme de los filisteos por la pérdida de mis ojos.

29. Entonces Sansón empujó fuertemente las columnas y gritó:

30. —Muera yo junto con los filisteos.Y el templo se derrumbó sobre los jefes de los filisteos y sobre todo el pueblo. Y los que él mató en el momento de morir fueron más de los que había matado en toda su vida.

31. Más tarde sus hermanos y otros parientes fueron a buscar el cuerpo, y lo llevaron nuevamente a su tierra y lo sepultaron entre Zora y Estaol, donde Manoa había sido sepultado.Sansón había gobernado a Israel durante veinte años.

Jueces 16