9. Jesús le contestó:—¡Felipe! ¿Ya llevo mucho tiempo entre ustedes y todavía no me conoces? El que me ha visto a mí, también ha visto al Padre. ¿Cómo puedes decirme: “Déjanos ver al Padre”?
10. ¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las cosas que yo les digo, no las digo por mi propia cuenta. El Padre que está en mí, es el que hace sus propias obras.
11. Créanme cuando les digo que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí. Y si no, al menos créanme por las obras mismas.
12. »Les aseguro que el que cree en mí hará las mismas obras que yo hago, y hará obras todavía mayores porque yo vuelvo al Padre.
13. Todo lo que ustedes pidan en mi nombre, yo lo haré; así el Padre será glorificado en el Hijo.
14. Yo haré lo que ustedes pidan en mi nombre.
15. »Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos.
16. Y yo le pediré al Padre, y él les enviará otro Consolador para que siempre esté con ustedes.
17. Él es el Espíritu de verdad; el mundo no lo puede recibir porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes.
18. No los voy a dejar huérfanos; volveré a estar con ustedes.
19. Dentro de poco el mundo ya no me verá, pero ustedes sí me verán. Y porque yo vivo, también ustedes vivirán.
20. En aquel día ustedes se darán cuenta de que yo estoy en mi Padre, y que ustedes están en mí, y yo en ustedes.
21. El que hace suyos mis mandamientos y los obedece, ese es el que me ama. Y al que me ama, mi Padre lo amará, y yo también lo amaré y me mostraré a él.
22. Judas, (no el Iscariote) le dijo:—Señor, ¿por qué te mostrarás a nosotros y no al mundo?
23. Jesús le contestó:—El que me ama, obedece mi palabra. Por eso, Dios lo amará y vendremos a vivir con él.
24. El que no me ama, no obedece mi palabra. Estas palabras que ustedes oyen no son mías, sino del Padre, que me envió.
25. »Les digo todo esto ahora que todavía estoy con ustedes.