1. Jehová le dijo a Josué:—No temas ni desmayes, toma contigo toda la gente de guerra, y levántate y sube a Hai. La he entregado en tus manos para que la conquistes. He entregado en tus manos al rey de Hai y a todo su pueblo.
2. Harás con ellos lo mismo que hiciste con Jericó y su rey. Pero esta vez podrán quedarse con el botín y el ganado. Prepara una emboscada detrás de la ciudad.
5. —Este es el plan —les explicó—: Cuando ataque el grueso del ejército, los hombres de Hai saldrán a pelear de la manera que lo hicieron antes, y nosotros huiremos.
6. Dejaremos que nos persigan hasta que todos hayan salido de la ciudad. Dirán: "Los israelitas están huyendo nuevamente".
7. Entonces ustedes saldrán de su escondite y entrarán en la ciudad, porque Jehová nos la entregará.
8. Prendan fuego a la ciudad como Jehová lo ha ordenado. Bien, ya saben lo que tienen que hacer.
9. Se pusieron en marcha aquella noche y tendieron una emboscada entre Betel y el lado occidental de Hai. Pero Josué y el resto del ejército se quedaron en el campamento de Jericó.
10. A la mañana siguiente, temprano, Josué hizo que sus hombres se levantaran y emprendieron la marcha hacia Hai acompañados por los ancianos de Israel,
11-13. y se detuvieron a la orilla de un valle al norte de la ciudad. Aquella noche Josué envió otros cinco mil hombres a que se unieran a los soldados que estaban emboscados en el lado occidental de la ciudad, y él pasó la noche en el valle.
14. El rey de Hai, al ver a los israelitas al otro lado del valle, salió en la madrugada y los atacó en la llanura del Arabá. No sabía que había una emboscada detrás de la ciudad.
15. Josué y el ejército israelita huyeron a través del desierto como si estuvieran completamente derrotados,
16. y todos los soldados de la ciudad salieron en su persecución. La ciudad quedó indefensa.
17. No quedó un solo soldado en Hai, y las puertas de la ciudad quedaron abiertas de par en par.