4. ¿Será porque eres bueno que te castiga?
5. De ningún modo. ¡Es por tu maldad! Tus pecados son innumerables.
6. Por ejemplo, seguramente te habrás negado a prestarle dinero a tus amigos menesterosos a menos que te dejaran su ropa en prenda. ¡Los habrás dejado desnudos!
7. Seguramente le habrás negado agua al sediento y pan al hambriento.
8. Pero a los hombres importantes sin duda les habrás dado cuanto querían, y habrás permitido al rico vivir en donde se le antojara.
9. ¡Habrás echado a las viudas sin ayudarles, y quebrado los brazos de los huérfanos!
12. »¡Qué grande es Dios, más alto que los cielos y más elevado que las estrellas!