7. Mis ojos están nublados de llorar y no soy sino sombra de lo que fui.
8. Los varones rectos se asombran al verme. Pero un día los inocentes se alzarán por sobre los impíos;
9. los justos progresarán y marcharán adelante; los de corazón puro serán cada vez más vigorosos y fuertes.
10. »En cuanto a ustedes, váyanse, se lo ruego; porque no veo ni uno sabio entre ustedes.
11. Mis buenos días pasaron. Mis esperanzas han desaparecido. Los anhelos de mi corazón se han deshecho.
12. Dicen que la noche es día y el día, noche; ¡cómo pervierten la verdad!
15. ¿Dónde, pues, está mi esperanza? ¿Hay quién pueda encontrarla?
16. No, mi esperanza bajará conmigo al sepulcro. ¡Juntos reposaremos en el polvo!»