1. »iCuán frágil es el hombre! ¡Cuán pocos sus días y cuán atribulados!
2. Un instante abre su corola como flor, y se marchita; como sombra de efímera nube, pronto se desvanece.
3. ¿Tan duro has de ser con los frágiles hombres, y exigirles cuentas?
4. ¿Cómo puedes exigir pureza de quien nació impuro?
11-12. Como agua que se evapora de un lago; como río que desaparece en la sequía, así el hombre yace por última vez y no vuelve a levantarse hasta que los cielos ya no existan; no se levantará ni se despertará de su sueño.
18-19. »Los montes se desgastan y desaparecen. Las rocas se desprenden de su sitio. El agua convierte en arena las rocas. Los torrentes erosionan el suelo. De igual modo desvaneces tú la esperanza humana.
20-21. Siempre prevaleces sobre el hombre, y él desaparece del escenario. Lo vuelves viejo y arrugado, y luego lo despides. Jamás se entera si sus hijos alcanzan honra; si fracasan y se enfrentan al desastre, él no lo sabe.