35. Al verlo caminando, los habitantes de Lida y Sarón se convirtieron al Señor.
36. En la ciudad de Jope vivía una mujer llamada Tabita (que significa Dorcas), discípula que siempre estaba haciendo algo por los demás, especialmente por los pobres.
37. En aquellos días cayó enferma y murió. Después de lavar su cuerpo, lo colocaron en una sala del segundo piso.
38. Al enterarse los discípulos de que Pedro andaba cerca de Lida, enviaron a dos hombres a rogarle que fuera a Jope.
39. Pedro accedió. Al llegar, lo llevaron a la sala donde reposaba el cadáver de Dorcas. El cuarto estaba lleno de viudas que lloraban mientras mostraban las túnicas y vestidos que Dorcas había hecho.
40. Pedro les ordenó que salieran del cuarto y se arrodilló a orar. Luego se volvió hacia el cadáver:—Levántate, Tabita —le ordenó.Inmediatamente ella abrió los ojos; y al ver a Pedro, se incorporó.
41. Él le dio la mano, la ayudó a ponerse de pie y llamó a los creyentes y a las viudas para que la vieran.
42. Y cuando la noticia se esparció por el pueblo, muchos creyeron en el Señor.
43. Pedro permaneció varios días en Jope en casa de Simón el curtidor.