Hechos 3:1-18 Nueva Biblia al Día (NBD)

1. En cierta ocasión, Pedro y Juan fueron al templo a orar. Era como a las tres de la tarde.

2. Allí vieron a un lisiado de nacimiento, a quien todos los días traían y colocaban junto a la puerta del templo llamada la Hermosa, para que pidiera limosna.

3. Cuando el lisiado vio a Pedro y Juan que iban a entrar al templo, les pidió dinero.

4. Los apóstoles lo miraron fijamente.—¡Míranos! — le dijo Pedro.

5. El lisiado los miró con ansiedad, esperando recibir una limosna.

6. —No tengo dinero que darte —continuó Pedro—. Pero te daré lo que tengo. ¡En el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y camina!

7. Entonces Pedro lo tomó de la mano y lo levantó. Al instante, los pies y los tobillos se le fortalecieron

8. a tal grado que se levantó de un salto y comenzó a andar. Más tarde, entró al templo con ellos, saltando y alabando a Dios.

9. Toda la gente lo vio caminando y alabando a Dios,

10. y reconocieron que era el lisiado que estaban acostumbrados a ver en el templo, junto a la Hermosa, y se quedaron asombrados.

11. Todos fueron corriendo al portal de Salomón, donde el lisiado tenía firmemente asidos a Pedro y a Juan.

12. Y viendo eso, Pedro les dirigió la palabra:—Hombres de Israel —les dijo—, ¿qué hay de sorprendente en esto? ¿Por qué nos miran como si hubiéramos hecho andar a este hombre mediante nuestro propio poder y por nuestra piedad?

13. El Dios de Abraham, de Isaac, de Jacob y de nuestros antepasados, a través de este milagro ha honrado a su siervo Jesús, a quien ustedes entregaron y rechazaron ante Pilato, a pesar de que éste estaba resuelto a ponerlo en libertad.

14. Ustedes no quisieron que libertaran al Santo y Justo; al contrario, demandaron la libertad de un asesino

15. y mataron al autor de la vida. Pero Dios le devolvió la vida, de ello nosotros somos testigos.

16. »Este hombre se sanó en el nombre de Jesús, y ustedes saben que era inválido. La fe en el nombre de Jesús logró la perfecta curación de esta persona.

17. »Hermanos, comprendo que lo que ustedes le hicieron a Jesús lo hicieron en ignorancia, y lo mismo podría decirse de sus dirigentes.

18. Pero Dios estaba cumpliendo así las profecías acerca de los sufrimientos del Mesías.

Hechos 3