Hechos 24:8-21 Nueva Biblia al Día (NBD)

8. Usted mismo puede interrogarlo y darse cuenta de que todas las acusaciones que le hacemos son verdad.

9. Los judíos afirmaron que la acusación era cierta.

10. El gobernador, por medio de una seña, le concedió la palabra a Pablo y éste dijo:—Sé que desde hace muchos años usted ha sido juez de esta nación. Por eso con gusto presentó mi defensa.

11. Usted puede comprobar que apenas hace doce días que llegué a Jerusalén para adorar en el templo.

12. Los que me acusan no me encontraron discutiendo con nadie en el templo, ni alborotando a la gente en las sinagogas ni en ninguna otra parte de la ciudad.

13. Ellos no pueden probar las cosas de las que me acusan.

14. »Pero esto sí confieso: que adoro al Dios de nuestros antepasados y que sigo este Camino que los que me acusan llaman secta. Yo estoy de acuerdo con todo lo que enseña la ley y creo lo que está escrito en los profetas.

15. Al igual que estos hombres, tengo la esperanza en Dios de que él resucitará tanto a los justos como a los injustos.

16. Por eso trato de que mi conciencia esté siempre limpia delante de Dios y de los hombres.

17. »Depués de haber estado fuera de Jerusalén por varios años, regresé para traer donativos a mi pueblo y presentar ofrendas.

18. Eso es lo que estaba haciendo en el templo. Ya me había purificado cuando ellos me encontraron. No había conmigo ni mucha gente ni estaba yo haciendo ningún alboroto.

19. Los que estaban allí eran algunos judíos de la provincia de Asia. Ellos son los que deberían estar aquí, frente a usted, para acusarme. Si es que tienen algo en mi contra.

20. Pero si no es así, que los que están aquí digan si encontraron en mí algún delito, cuando me llevaron ante el Consejo.

21. Tal vez fue lo que dije en voz alta delante de ellos: “Ustedes me están juzgando hoy porque creo en la resurrección de los muertos.”»

Hechos 24