15. Al igual que estos hombres, tengo la esperanza en Dios de que él resucitará tanto a los justos como a los injustos.
16. Por eso trato de que mi conciencia esté siempre limpia delante de Dios y de los hombres.
17. »Depués de haber estado fuera de Jerusalén por varios años, regresé para traer donativos a mi pueblo y presentar ofrendas.
18. Eso es lo que estaba haciendo en el templo. Ya me había purificado cuando ellos me encontraron. No había conmigo ni mucha gente ni estaba yo haciendo ningún alboroto.
19. Los que estaban allí eran algunos judíos de la provincia de Asia. Ellos son los que deberían estar aquí, frente a usted, para acusarme. Si es que tienen algo en mi contra.