Hechos 22:1-8 Nueva Biblia al Día (NBD)

1. —Padres y hermanos, escuchen lo que tengo que decir en mi defensa.

2. Al oír que les hablaba en arameo, guardaron más silencio. Entonces Pablo continuó:

3. «Yo soy judío. Nací en Tarso de Cilicia, pero me crié en esta ciudad. Gamaliel fue mi maestro y él me enseñó la ley de nuestros antepasados. Me esforcé porque se honrara a Dios como lo hace cualquiera de ustedes hoy día.

4. Antes, perseguía hasta la muerte a los seguidores de este Camino, los arrestaba y los metía en la cárcel sin importarme si eran hombres o mujeres.

5. El jefe de los sacerdotes y todo el Consejo de ancianos son testigos de que así fue. Ellos mismos me dieron cartas para nuestros hermanos judíos en Damasco, y fui allá para traer a Jerusalén a los que encontrara, para que aquí los castigaran.

6. »Pero cuando iba en camino y ya me acercaba a Damasco, como a eso del mediodía, de repente una intensa luz del cielo relampagueó a mi alrededor.

7. Caí al suelo y escuché una voz que me decía: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”

8. Yo pregunté: “¿Quién eres, Señor?”Él me contestó: “Yo soy Jesús de Nazaret, al que tú persigues”.

Hechos 22