26. De modo que el total de los que fueron a Egipto, de los descendientes directos, sin contar a las esposas de los hijos de Jacob, eran sesenta y seis.
27. Considerando la familia de José con sus dos hijos, que estaban en Egipto, sumaban setenta.
28. Jacob envió a Judá adelante para que le dijera a José que ya estaban en camino y que pronto llegarían a Gosén. Cuando llegaron a ese lugar,
29. José pidió que le prepararan su carro, y fue hasta allá, para ver a su padre. Cuando se encontraron se abrazaron y lloraron largo rato.
30. Entonces Israel le dijo a José:—¡Ya me puedo morir, porque te he vuelto a ver y sé que estás vivo!
31. José entonces le dijo a sus hermanos y a sus familias:—Voy a decirle al faraón que ustedes están aquí, que han venido de la tierra de Canaán a quedarse conmigo.
32. Además le diré: “Estos hombres son pastores. Trajeron consigo sus ovejas y vacas, y todo lo que tenían”.
33. Entonces, cuando el faraón los llame y les pregunte por su ocupación,
34. díganle: “Hemos sido pastores de ovejas desde nuestra niñez, y nuestros padres lo han sido durante generaciones”. Cuando le digan esto, los dejará vivir en la tierra de Gosén, porque para los egipcios es cosa detestable vivir junto a pastores de ovejas.