Génesis 42:28-38 Nueva Biblia al Día (NBD)

28. —¡Miren! —le dijo a sus hermanos—, ¡el dinero que yo pagué está en mi costal!Quedaron todos llenos de terror. Temblando se decían unos a otros:—¿Qué es lo que Dios nos ha hecho?

29. En ese estado llegaron a Canaán y le contaron a su padre Jacob todo lo que les había ocurrido.

30. —El hombre que gobierna ese país nos habló en forma muy severa —le dijeron—, y nos tomó por espías.

31. —“No, no” —le dijimos—, “somos hombres honrados; no somos espías.

32. Somos doce hermanos, hijos de un mismo padre; uno murió, y el menor quedó con nuestro padre en la tierra de Canaán”.

33. Entonces nos dijo:—De esta manera sabré que son lo que dicen ser. Dejen uno de sus hermanos aquí conmigo y lleven el trigo para su familia y regresen a su tierra.

34. Pero tienen que traer a su hermano menor cuando vuelvan. Entonces sabré si son espías u hombres de bien; si demuestran ser lo que han dicho que son, yo les devolveré a su hermano y podrán volver cuantas veces quieran a comprar trigo.

35. A medida que vaciaban los costales, iban descubriendo que dentro de cada uno estaba el dinero que habían pagado por el trigo. El terror se apoderó de todos ellos y también de su padre.

36. Entonces Jacob exclamó:—¡Ustedes me han privado de mis hijos! Perdí a José, luego a Simeón, y ahora quieren llevarse a Benjamín. Todo se ha confabulado en mi contra.

37. Entonces Rubén le dijo a su padre:—Mata a mis dos hijos si no te devuelvo a Benjamín. Yo respondo por su regreso.

38. Pero Jacob replicó:—Mi hijo no irá con ustedes, porque José su hermano murió y sólo él me ha quedado de los hijos de su madre. Si algo llegara a sucederle, yo me moriría.

Génesis 42