2. «Hombre mortal, canta esta triste canción por Tiro:
3. ¡Oh poderosa ciudad porteña, centro comercial de toda la costa, el SEÑOR Dios habla! Tú dices: “Yo soy la ciudad más hermosa de todo el mundo”.
4. Tú has extendido tus límites aun sobre el mar; tus arquitectos te han hecho construcciones maravillosas.
5. Eres como un barco construido de la madera más fina del SEÑOR. Tomaron un cedro del Líbano para hacerte el mástil.
6. Tus remos están hechos de robles de Basán. Las paredes de tu cabina son de ciprés de la costa sur de Chipre.
7. Tus velas están hechas del lino más fino de Egipto. Estás parada debajo de cubiertas de lienzo con colores brillantes, con anilinas púrpuras y escarlatas traídas de la parte oriental de Chipre. ¡Todo lo mejor de lo mejor!
8. Tus marineros vinieron de Sidón y de Arvad; tus timoneles son hombres hábiles de Zemer.
9. Sabios y experimentados artesanos de Guebal calafatean tus junturas. Naves vienen de todas las naciones con mercaderías para intercambiar y negociar contigo.
10. Tu ejército incluye mercenarios de la lejana Persia, Lidia y Fut. Ellos te sirven; es un orgullo para ti que sus escudos estén colgados sobre tus paredes; es la mayor de tus honras.
11. »De Arvad y Jelec son los centinelas que vigilan sobre tus murallas; tus torres defensivas están guarnecidas con hombres gamadeos. Sus escudos cuelgan fila tras fila sobre las murallas de tu ciudad coronando tu gloria, mostrando tu gran poderío.
12. De Tarsis proceden toda clase de riquezas para tus mercados: plata, hierro, estaño y plomo.
13. Comerciantes de Javán, Tubal y Mesec traen esclavos y utensilios de bronce para comerciar en tus mercados y bazares,