Exodo 16:2-23 Nueva Biblia al Día (NBD)

2. Allí también el pueblo se quejó contra Moisés y Aarón.

3. Les dijeron:—¡Ojalá el SEÑOR nos hubiera quitado la vida en Egipto! Allí nos sentábamos junto a las ollas llenas de carne y comíamos hasta quedar satisfechos. Pero ustedes nos han traído hasta este desierto para matarnos de hambre.

4. El SEÑOR le dijo a Moisés:«Yo voy a hacer que les caigan alimentos del cielo. Cada uno podrá salir y recoger cuanto pueda comer ese día. Los probaré en esto, para ver si siguen mis órdenes.

5. Diles que el sexto día de la semana recojan el doble de lo que recogen los demás días».

6. Así que Moisés y Aarón convocaron al pueblo a una reunión y le dijeron:—Esta tarde sabrán que fue el SEÑOR el que los sacó de la tierra de Egipto.

9. Luego Moisés le dijo a Aarón:—Diles a todos los israelitas que se reúnan delante del SEÑOR, pues él ha escuchado todas sus quejas.

10. Mientras Aarón les hablaba, apareció repentinamente del desierto, de dentro de la nube que los guiaba, la majestuosa gloria del SEÑOR.

13. Aquella tarde llegó una gran cantidad de codornices y cubrió el campo. Al día siguiente, todo el desierto, alrededor del campamento, amaneció mojado de rocío,

14. y cuando desapareció el rocío, quedó sobre el suelo una cosa menuda parecida a la escarcha.

15. Cuando los israelitas vieron aquello, se preguntaban unos a otros:—¿Qué es esto?Y Moisés les dijo:—Es el pan que el SEÑOR les da.

16. El SEÑOR ha dicho que cada uno debe recoger cuanto sea necesario para su familia, más o menos dos litros por persona.

17. El pueblo de Israel empezó a recogerlo.

18. Había suficiente para todos, unos dos litros por persona. A los que juntaron mucho nada les sobró, y a los que juntaron poco, nada les faltó. Cada familia tuvo lo necesario.

19. Y Moisés les dijo:—No dejen nada para mañana.

20. Pero hubo algunos que no prestaron atención, y guardaron para el día siguiente; y cuando miraron lo que habían guardado, estaba lleno de gusanos. ¡Se les había podrido! Moisés se enojó mucho con ellos.

21. De modo que recogían alimento cada mañana, según sus necesidades. Cuando el sol calentaba la tierra, el alimento se derretía y desaparecía.

22. El sexto día recogieron el doble de lo acostumbrado, unos cuatro litros. Los dirigentes del pueblo, al ver esto, fueron y le informaron a Moisés.

23. Entonces Moisés les dijo:—El SEÑOR ha señalado el sábado como día de reposo, de solemne reposo, en el que deben apartarse de sus tareas diarias. Por eso es que deben preparar hoy todo lo que necesiten, y guardar lo que sobre para mañana. Todo lo que deban cocinar o hervir deben hacerlo hoy, y lo que sobre deben guardarlo para mañana.

Exodo 16