3-4. Díganles a los israelitas que cada año, en el décimo día de este mes, cada familia tomará un cordero. Si la familia es pequeña, compartirá el cordero con otra familia pequeña del vecindario; el hacer o no esto dependerá del tamaño de la familia.
23. El SEÑOR pasará por Egipto y dará muerte a los egipcios; pero cuando vea la sangre sobre el travesaño de la puerta y sobre los dos postes, pasará de largo y no permitirá que el destructor entre a matar a sus hijos.
24. Recuerden: esta es una ley permanente para ustedes y para sus descendientes.
25. Cuando entren en la tierra que el SEÑOR les dará, como ha prometido, y estén celebrando la Pascua,
26. y sus hijos les pregunten: “¿Qué significa esto? ¿Qué ceremonia es ésta?",
27. ustedes les responderán: “Es la celebración del paso del SEÑOR, porque pasó de largo por los hogares del pueblo de Israel cuando mató a los egipcios. Pasó de largo por nuestras casas y no entró a destruirnos”».Y todos los israelitas inclinaron la cabeza y adoraron,
28. e hicieron lo que el SEÑOR les había ordenado por medio de Moisés y de Aarón.
29. A medianoche, el SEÑOR dio muerte a los primogénitos de Egipto, desde el hijo mayor del faraón hasta el hijo mayor del cautivo que estaba en el calabozo. Además, dio muerte a toda primera cría de animal.
30. El faraón, sus funcionarios y todo el pueblo de Egipto se levantaron en la noche. Y hubo amargo llanto en todo Egipto, porque no había casa donde no hubiera un muerto.
31. El faraón llamó a Moisés y a Aarón durante la noche y les dijo: «Salgan, por favor, de en medio de mi pueblo; vayan y sirvan a su Dios como querían.