Exodo 10:2-16 Nueva Biblia al Día (NBD)

2. Un día podrán ustedes contarles a sus hijos y a sus nietos las cosas increíbles que estoy haciendo en Egipto. Les contarán cómo destruí a los egipcios, y cómo demostré que yo soy el SEÑOR».

3. Moisés y Aarón pidieron otra audiencia al faraón y le dijeron:El SEÑOR, Dios de los hebreos, pregunta: «¿Hasta cuando te negarás a someterte a mí? Deja que mi pueblo vaya y me adore.

6. Estarán en tu palacio, en las casas de tus funcionarios y en todas las casas de Egipto. Jamás en la historia de Egipto ha habido una plaga como ésta».Tan pronto acabó de hablar, Moisés dio media vuelta y se retiró.

7. Los funcionarios se presentaron delante del faraón, y le preguntaron:—¿Vas a permitir que seamos destruidos completamente? ¿No sabes que todo Egipto está en ruinas? Deja que ese pueblo vaya y adore al SEÑOR su Dios.

8. Entonces, el faraón mandó a llamar a Moisés y a Aarón, y les dijo:—Bien, salgan y adoren al SEÑOR su Dios. Pero necesito que me informen cuántos irán.

9. —Iremos con nuestros niños y nuestros ancianos, nuestras ovejas y nuestras vacas —respondió Moisés—. Llevaremos todo lo nuestro, porque iremos en santa peregrinación.

10. —¡Que el SEÑOR los ayude! —respondió el faraón—. ¿Acaso creen que les dejaré llevar a los pequeños? ¡Ya veo lo que están planeando!

11. ¡Jamás accederé a esto! Si quieren ir a adorar al SEÑOR, entonces vayan solamente ustedes los hombres.Luego echaron de la presencia del faraón a Moisés y a Aarón.

12. Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: «Levanta tu mano sobre la tierra de Egipto, para hacer que vengan langostas a cubrir la tierra y a comer todo lo que quedó después del granizo».

13. Moisés levantó la vara y el SEÑOR hizo que un viento oriental soplara todo aquel día y toda la noche. A la mañana siguiente, el viento oriental había traído las langostas.

14. Y las langostas cubrieron a Egipto completamente. Era la peor plaga de langostas en la historia de Egipto. ¡Nunca habrá otra igual!

15. Las langostas cubrían la tierra y no permitían que se viera el sol, de modo que la tierra estaba en tinieblas. Las langostas se comieron toda la vegetación que había escapado del granizo. No quedó nada verde, ni árbol ni planta, en todo Egipto.

16. El faraón mandó a llamar urgentemente a Moisés y a Aarón, y les dijo: «Confieso que he pecado contra el SEÑOR su Dios, y contra ustedes.

Exodo 10