15. sino también con todas las generaciones futuras de Israel.
16. »Ciertamente recuerdan cómo vivimos en la tierra de Egipto y cómo salimos de ella, cómo cruzamos a salvo el territorio de las naciones enemigas.
17. Y ustedes han visto todos sus ídolos paganos hechos de piedra, de madera, de plata y de oro.
18. El día en que cualquiera de ustedes, hombre o mujer, familia o tribu de Israel, comience a apartarse del SEÑOR nuestro Dios y desee adorar los dioses de esas naciones, ese día saldrá de entre ustedes una raíz que producirá fruto amargo y venenoso.
19. »Que ninguno de ustedes, al oír las advertencias de esta maldición, piense livianamente y se diga: “Prosperaré aun cuando me conduzca de acuerdo con mi propio capricho”. Porque será la ruina de todos.