1. »Cuando salgas a la guerra y veas delante de ti un gran número de caballos y carros, y un ejército mucho mayor que el tuyo, no tengas miedo. El SEÑOR tu Dios, el mismo Dios que te sacó de Egipto, está contigo.
2. Antes de comenzar la batalla, el sacerdote se pondrá de pie delante del ejército de Israel y dirá:
3. “Oye, Israel, ahora que sales a la batalla no tengas miedo.
4. El SEÑOR tu Dios va contigo. él peleará en favor tuyo contra tus enemigos, y te dará la victoria”.