Deuteronomio 15:15-23 Nueva Biblia al Día (NBD)

15. Recuerda que fuiste esclavo en la tierra de Egipto, y que el SEÑOR tu Dios te rescató; por eso es que te estoy dando este mandamiento.

16. »Pero si tu esclavo no quiere dejarte y dice que te ama y que le gusta estar contigo y que se lleva muy bien contigo,

17. toma una lezna y horádale la oreja contra la puerta, y después de eso será esclavo tuyo para siempre. También harás esto con las esclavas.

18. Cuando le des la libertad a un esclavo, no te pese hacerlo; porque la verdad es que durante seis años él te ha costado menos de la mitad de lo que cuesta un empleado, y el SEÑOR tu Dios te prosperará en todo porque tú le has dado la libertad.

19. »Dedicarás al SEÑOR todos los primogénitos machos de tus vacas y de tus ovejas. No usarás los primogénitos de tus vacas para trabajar en los campos, y no trasquilarás a los primogénitos de tus ovejas.

20. En vez de hacer eso, tú y tu familia se reunirán cada año a comer estos animales delante del SEÑOR tu Dios, en su santuario.

21. Sin embargo, si el primogénito tiene algún defecto, si es cojo o ciego, por ejemplo, o tiene cualquiera otra imperfección, no lo sacrificarás.

22. Lo usarás para la alimentación de tu familia en casa. Cualquiera, aun el que esté ceremonialmente impuro en ese tiempo se podrá comer de la misma manera como se come una gacela o un ciervo.

23. Pero no comas la sangre; derrámala en la tierra como si fuera agua.

Deuteronomio 15